Y ahí estaba yo como idiota
haciéndole favores a todos en el pueblo: iba por el mandado, buscaba
ingredientes, enviaba mensajes, aceptaba retos de cualquier tipo como vencer a
algún bandido o pescar 40 kilos de pescado. ¿alguien puede explicarme qué persona
en su sano juicio quiere 40 kilos de pescado?
Como sea nada de esto
fue en vano, adquirí bastante agilidad, sabiduría, fortaleza, un espíritu
indomable, carisma, el respeto de todos los aldeanos y una dotación de pescado
para el resto de mis días.
Y logré hacer todo esto desde
mi cómodo sillón. ¿Qué cómo logré esto? Bien, todo comenzó hace unos días
mientras yo estaba tranquilamente viendo el final de Dawson’s Creek cuando de
pronto Steve Jobs se escapó del infierno por unos momentos para ofrecerme el
nuevo iPod G5. Me persuadió camuflajeando sus habilidadescomo vendedor con un discurso de superación personal y me convenció de que yo sería una
mejor persona si aceptaba el dispositivo, por supuesto a cambio de una
cuantiosa suma en efectivo. Pero como era el buen fin se sintió generoso y dijo
que lo podía pagar en mensualidades. Me convenció, además por fin mis amigos
iban a aceptarme por lo que tenía y no por lo que era... ¡malditos hippies! Es
hora de que acepten que también son unos consumistas de mierda... ehem... cof-cof...
Me lo dio y posteriormente
se fue flotando en un as de llamas que incendió parcialmente una de las
cortinas. Y ahí me encontraba yo con una tecnología salida del mismo infierno.
En un principio quise
reservarme de usarlo de otras cosas que no fuera escuchar música. Pero poco a
poco me fui dando cuenta del potencial diabólico de dicho aparatejo. Comienzas
con cosas sencillas como el reloj, una alarma y una que otra foto. Pero poco a
poco te absorbe y continúas con una agenda minuciosa, notificaciones aquí y
allá, recordatorios y cuando menos los esperes ¡¡Fuuufff!! adiós vida
social, adiós 5 años de ejercicio y lucha contra el sobrepeso y hola a cientos
de aplicaciones absurdas engendradas desde la fuente misma de la ociosidad del
universo. De donde seguro también surgieron las sandwicheras-radio, la
gorra-radioAM y la lavadora-teléfono.
Y bueno, todo culmina en que terminas
bajando alguna ociosidad como los Sims Medievales y te andas por ahí haciendo
desbarajustes amorosos, evangelizando gente y lanzando hechizos. Pero he de
decir que no me fue tan mal. Y a continuación verán el por qué.
Navegando por el AppleStore
me encontré con tremendo nido de cosas inútiles, fue como andarse en un tianguis virtual donde solo venden baratijas hechas en China. Con aplicaciones que se repetían, versiones viejas y nuevas y la versión para comprar. Y sin mas
rodeos he aquí algunas de las peores aplicaciones de Apple.
iEyes
iCerveza
La pantalla se vuelve un contenedor con cerveza el cual simula vaciarse conforme inclinas el iPhone. Dicen que gracias al efecto placebo también puede ocasionar una aparente embriaguez, pero sospecho que solo confunden esto con el hecho de que solo personas no muy inteligentes y algo atolondradas bajarían una aplicación así.
Knock on Wood
La pantalla se hace de un fondo que simula ser madera... para que toques madera y los elfos de la madera te den buena suerte y puedas conseguirte una vida.
iPee
iPee
Es un juego en donde en la pantalla aparece un WC y tienes que apuntar para orinar dentro sin salpicar.... sin comentarios.
Bic-Zippo
Es una aplicación que tiene la imagen de un mechero encendido. Ya sabrán alguno de ustedes que cuando vas a un concierto a veces se ponen punkys y no te dejan entrar con tu mechero por el miedo de que lo utilices para activar algún tipo de bomba. Pero tu solo lo llevas para lo que es: para prenderlo en la rola mas puñeñe del concierto al estilo Woodstock.
He aqui esta innovadora aplicación que ahorra todos esos problemas que atormentaban a nuestra moderna humanidad.
Todos están ahí lloriqueando por la balada, pero ¡zaz! sacas tu iPod con la aplicación para iluminar sus caminos y detener sus lágrimas... hasta que alguien llega, te pega y te lo quita y no te queda mas que compartir la misma miserable existencia que los demás a tu alrededor.
SimStapler
Se trata de una engrapadora virtual que puedes oprimir las veces que quieras, pero sin esas fugas multimillonarias en utensilios de oficina. No sé cómo pude vivir toda mi vida sin esta belleza.... toda la diversión de una engrapadora, pero sin grapas... y sin diversión...
Taxi Hold'em
Se trata de una aplicación que tiene un letrero parpadeante con la palabra "TAXI" en amarillo y negro. ¿Para qué sirve?
Bueno, si la pereza te persigue uno de esos días en que necesitas del transporte público, que no tienes ganas de gritar ni de hacer señal alguna y que además mueres por hacer el ridículo enseñando a media ciudad tu ingenio inútil para hacer uso de tu iPod/iPhone. Esto es para ti.
Hold the Button
Nada extraordinario, es un concurso on-line para ver quien aguanta mas tiempo con su dedo oprimiendo un botón.... el record es de 14 horas. Si no encuentran alguna utilidad en esto, puedo decirles una: subirte el autoestima al darte cuenta que en realidad SI tienes una vida.
Plastico de burbujas.
Esta aplicación resulta bastante ecológica. Puedes reventar burbujas de plástico virtuales las veces que te plazca en un momento de estrés sin producir basura y ahorrarte tu plástico de burbujas de verdad para cuando necesites envolver y protegerte las pocas neuronas que te sobran para cubrir tus funciones vitales
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